Relojes de sol, unas máquinas maravillosas.
Hoy en día, aun cuando disponemos de relojes que miden el tiempo con precisión de microsegundos, todavía nos quedamos encantados al observar un cuadrante solar, colocado en la fachada de una casa, en el suelo de una plaza, o presidiendo un parque. Sobre estos cuadrantes, el Sol, en su imperturbable caminar diario nos va ofreciendo su luz para indicarnos el paso de las horas, nosotros con un poco de imaginación y un poco de ciencia podremos hacer diseños de cuadrantes solares de las más variadas formas y materiales.